¿Cuál es su opinión sobre la necesidad de redactar una nueva ordenanza que unifique criterios y simplifique los trámites de solicitud de licencias urbanísticas del Ayuntamiento de Madrid?
Es necesario e imprescindible la simplificación y la reducción de normativa en muchos casos contradictoria y redundante y simplificar al máximo los trámites de solicitud de licencias para garantizar la seguridad jurídica del administrado. Es esencial asimismo alcanzar una mayor eficiencia y coordinación en la gestión municipal.
Una reforma es absolutamente necesaria.Hay que unificar criterios, simplificar trámites , apoyar las declaraciones responsables, acotar plazos de tramitación, consolidar la validez de los silencios positivos y los certificados de conformidad, y todo ello con pleno respeto de la legalidad. Así mismo entendemos este paso como un paso más, para conseguir un sistema de permisos de actividad que funcione en Madrid. Los empresarios madrileños y los ciudadanos nos lo merecemos. Queremos que el Ayuntamiento facilite y que no sea un problema para el desarrollo de los proyectos en la ciudad. En ello llevamos desde el año 2009, más de diez años. Esperamos que esta vez sea la definitiva, pero para ello necesitamos un gobierno municipal que este a la altura, que clarifique el sistema normativo, pero también que gestione de manera eficaz. Las empresas perviven porque se gestiona bien, no hay excusa para que el Ayuntamiento también lo haga, y además en su caso con la mayor transparencia.
Es indispensable y urgente, se han de dar facilidades al ciudadano, incluso aplicando un silencio administrativo positivo y evitar el sistemático incumplimiento de plazos de la Ley de Procedimiento Administrativo, los plazos se aplican siempre al interesado, y nunca se exige al funcionario de quien depende la tramitación, se debe exigir el cumplimiento de plazos.
Es fundamental la simplificación. No tiene sentido tener dos ordenanzas distintas para tramitar licencias. Pero la complejidad en la tramitación se debe muchas veces a normativas técnicas contradictorias y obsoletas, como la OGPMAU, la ORPE, ZPAE, etc. Los procedimientos se deberían reducir a 2 o 3 como mucho. Las ECU deberían estar presentes en todos los procedimientos pues al ser voluntaria su participación el ciudadano no puede sentirse obligado a tramitar a través de una entidad no pública. Tampoco pueden existir problemas de actuación de una ECU en uso residencial, ante posibles incumplimientos del derecho constitucional de inviolabilidad de domicilio, cuando la entidad colaboradora actúa autorizada voluntariamente por el titular.
Es necesario ya que la existencia de dos ordenanzas y y de varios procedimientos produce confusión en los ciudadanos e incluso entre los propios profesionales en materia de licencias lo que da lugar a multitud de resoluciones de inadecuación a procedimiento o de falta de competencia del órgano municipal ante el que se plantea la solicitud
A continuación incluimos CUATRO preguntas genéricas que aunque no respondan literalmente a la pregunta planteada creemos que debieran TENERSE EN CUENTA por los redactores de la nueva ordenanza: 1- Qué fórmulas se proponen para asegurar el cumplimiento de plazos en la concesión de licencias? 2- Qué fórmulas se proponen para garantizar la seguridad jurídica de las DR , y su silencio positivo? 3- Qué fórmulas proponen para evitar la dilatación inasumible de plazos por consultas a la Comisión de patrimonio? 4- Qué sistemas de control y de transparencia se plantean para que los ciudadanos podamos comprobar la eficiencia en el número de licencias y declaraciones responsables tramitadas en plazo?