Comienzo diciendo que uso las terrazas, pero no todas por principio. El portavoz de la asociación hostelera La Viña no dice exactamente la verdad. En la mayoría de las ciudades europeas la normativa es más dura y piensa más en el vecindario y en las personas en general. Hay zonas en Madrid intransitables sobre todo para personas con movilidad reducida o para carritos de bebe. Se ponen más mesas que las permitidas, práctica habitual de muchas terrazas, lo cual requeriría endurecer la inspección sobre todo en horas de mayor uso de las terrazas. El espacio público del centro, bueno y cada vez de más barrios, está privatizado para el negocio. Le preguntaría al portavoz de La Viña sobre que tipo de empleo se crea. Lo sabemos: horarios desmedidos, mal pagado y a veces trabajo en negro. Hay que endurecer la normativa pensando en l@s vecin@s, en las personas en general, limitar el nº de mesas y horarios de terraza; prohibir terrazas en determinadas zonas como la avda Albufera; más inspección.

No se hace negocio con los espacios públicos de TODOS. No queremos terrazas. No queremos que unos pocos negociantes nos quiten lo que es nuestro, de TODOS. Si quieren dar servicios, como gustan decir, que vayan a ayudar a los enfermos de cáncer en los hospitales, o que hagan labores de limpieza y servicio social a la comunidad.