Totalmente necesaria. En ASERLUZ creemos que hay DOS motivos principales: (1) Las inútiles dimensiones (por diminutas) para determinados elementos no contaminantes visualmente (rótulos de comercio en la zona 2, de sólo 30 cm de alto) y las regulaciones en las condiciones de luminosidad en cuanto a distancias, porque hoy día existen dispositivos de control de iluminación integrados en los rótulos que las hacen innecesarias (2) El freno que está suponiendo para la implantación de la tecnología LED la actual ordenanza (la gente prefiere no tocar sus rótulos luminosos para ahorrarse una posible denegación de licencia), lo que hace que se esté desaprovechando una tecnología que puede suponer un ahorro espectacular en una ciudad con 207.000 locales censados por el ayuntamiento, en los que entre el 40% y el 75% de los mismos usan todavía fuentes de iluminación ineficientes (fluorescencia, halógenos...). Una ocasión perdida de ahorrar un 80% de electricidad y emisiones de CO2 a la atmósfera.

Creo que sería una buena oportunidad para prohibir las pegatinas de cerrajeros y en general toda promoción dañina para la propiedad tanto pública como privada. Si no puede despegarse fácilmente no deberían ponerlo. ( si lo hicieran en los coches seguro que la gente se quejaba... pero como es en la casa o en las farolas). El ayuntamiento gasta un dineral en gente que rasca las pegatinas de semáforos, farolas y demás. Los particulares tenemos las cajas de registros llenas de pegatinas. Hay empresas que se lucran de eso.

La invasion del espacio visual es completa. Es dificil sacar una imagen rn algunos lugares sin que se cuele una marca comercial. Los hitimbolosnson el colmo. Es una aberracion humana tirar electricidad con pantallas publicitarias toda la noche. Contaminacion luminica. Destrozo de fachadas. Vulneracion del derecho del ciudadano a no tragar publicidad que no ha solicitado.

se tiene que intentar no secuestrar, después de pasado un tiempo, el espacio urbano con carteles o publicidad agobiante a ambos lados de las puertas, escaparates o columnas adyacentes, así como incentivar el cambio a leds si en las casas ya lo hacemos porqué en los luminiosos no?

Sí, considero que hay algunas modificaciones que realizar. No se puede tener diferentes interpretaciones de un artículo. La redacción debe ser clara, no puede dar lugar a interpretaciones subjetivas, los criterios para regular algo deben quedar bien definidos. También incorporar soportes que existen y que en la ordenanza hay un vacio legal, las pantallas digitales, pero, clara definición de zonas/lugar del emplazamiento y su uso, definir si es publicitario o es comunicación comercial propia del establecimiento, definan bien y con claridad.

La mayor parte de los anuncios incitan al consumo, motor de la sociedad actual y que creo que hay que reducir. Además, con frecuencia generan una contaminación visual important.

Pienso que es necesaria su regulación sobre todo en espacios protegidos, como el casco antiguo.

Quizá la totalidad de estas diatribas pudiera "esclarecerse" si llegárase a ser establecida realmente la acotación de EXTERIOR aun con idependencia del punto concreto donde esté asentada físicamente la localización del Anuncio... a este respecto, me permitiría recordar cómo a la "innombrable" se le prohibió la fijación DENTRO en autobuses urbanos de cualesquiera "adhesivos perforados" con imágenes hacia AFUERA que cubrieran la visión directa de los pasajeros. Pues bien: héte aqui, que la actual Corporación haciendo caso omiso de tal prohibición continúa entorpeciendo la vista "orientativa" de los más vulnerable pasajeros (ancianos, extranjeros, discapacitados) mediante la completa ENVOLTURA de anuncios adheridos sobre la carrocería del Autobús, que sólo son percibidos en su completa extensión (dirigida hacia afuera) desde las vías publicas a través de las cuales va circulando. Al igual que el molestísimo sobre-volumen del teleMetro que nos atronaba -antes- en los andenes.