Tarjeta Transporte Público no nominativa recargable
Código de la propuesta: MAD-2015-10-2853
Este sistema no sustituiría a la tarjeta nominativa, sino que facilitaría el uso ocasional del transporte público. Sustituiría a los billetes sencillos y de 10 viajes de todos los medios de transporte
Este sistema es distinto y complementario de la tarjeta TTP (tarjeta Transporte Público), ya que sustituiría a todos los billetes de uso ocasional: sencillos y de 10 viajes.
Mediante una tarjeta sin contacto RFID, de cartón desechable y recargable en estaciones, kioscos, etc, con número de serie para permitir su recarga por Internet, se acumula saldo en dinero, que se irá descontando con el uso. El saldo se podrá consultar en cualquier máquina expendedora o lector NFC (ej: móviles, tablet, pc).
Otra posibilidad es que la tarjeta sea una etiqueta autoadhesiva y poder pegarla donde uno quiera: teléfono, cartera. También podría asociarse al teléfono con NFC.
En función de la cantidad recargada se podrá premiar con saldo adicional, a modo de fidelización. Este sistema de fidelización se asemejaría al que actualmente aplican los billetes de diez viajes respecto a los sencillos, con posibilidad de rebajas aun mayores. Ejemplo:
- Entre 1.50 € y 15 € recibe 16 cts por euro
- Entre 16 € y 30 € recibe 20 cts por euro
- Entre 31 € y 45 € recibe 25 cts por euro
Además, en un sistema tarifario integrado se debe procurar que cada viaje pagado sirva para cubrir un trayecto dentro de una zona tarifaria, permitiendo combinar varios medios de transporte durante un tiempo determinado.
Las coronas tarifarias y diferentes operadores no supondrán una barrera al usuario, que actualmente tiene que detenerse y comprar billetes distintos. Si se inicia el viaje en la zona A y se amplía hacia otra zona (B1), por ejemplo, el sistema no nos descontaría un nuevo billete sencillo, sino el precio pendiente de abonar. La máquina de salida podrá igualmente descontar el importe que no se ha pagado al inicio del viaje. En la estación de Tres Olivos, por ejemplo, esto agilizaría muchísimo los transbordos.
Se podrán instalar máquinas expendedoras en los autobuses para no cargar con más trabajo a los conductores.
Todo lo anterior repercutirá en que la gente no espere colas innecesarias para comprar billetes de uso ocasional. Así, la espera será también menor para los usuarios que necesariamente tengan que acudir a la máquina.
Se ahorrará no solo tiempo sino también en papel y sistemas de ticketing, al ser los soportes reutilizables. Dichas tarjetas podrían tener un precio muy pequeño, que se iría amortizando con el uso.
Ejemplos de iniciativas similares, ya en funcionamiento: tarjeta Viva Viagem en Lisboa, tarjeta Barik en Bilbao o la Tarjeta Distrito Federal en México DF.
https://ecomovilidad.net/madrid/nueva-tarjeta-transporte-publico-anonima-y-recargable/
Esta bien la idea, junto al pago por NFC o Contacless impulsado en el ayuntamiento por la EMT y mastercard + Banco Santander en los autobuses del ayuntamiento. Pero también añadiría una sistema mas barato y ecológico que el de tarjetas de plástico o cartón. Una aplicación por móvil que englobe todas las del ayuntamiento + una de transporte, donde tengas esa misma tarjeta pero en tu aplicación, cada vez existen más móviles con NFC y permitiría ese uso combinado de una aplicación con todo
En otras propuestas he leído que se cree un sistema de tarifas en función del kilometraje. No sé cómo tienen pensado medir la distancia recorrida en un bus y controlar la salida. En el metro, sin canceladoras de salida, exactamente lo mismo. No me parece buena idea por eso. Para ello se crearon las coronas tarifarias, que actualmente ni siquiera se usan, salvo rn la red de cercanías.
La distancia recorrida se puede medir instalando arcos de lectura masiva RFID http://www.rfidcontrols.com/rfidcontrols/index.php/productos/arcos.html, en la entrada y en la salida de los autobuses y de las bocas de metro y cercanías. Por cierto, creo que es mejor que sea nominativa, para conocer mejor los itinerarios habituales de los usuarios, y optimizar la frecuencia y los itinerarios de las líneas de autobus. Un saludo cordial
Por otro lado, los arcos RFID están conectados a servidores, cuya contratación y mantenimiento también tiene coste. Irán conectados a unos armarios, conectados con otros armarios por medio de una red de fibra óptica… y esos armarios estarán conectados a dicho servidor). Los arcos le dicen al sistema dónde se encuentra fulano, hacia dónde va mengano y si zutano ha decidido tomar el camino que le ha dicho a su mujer o si ha doblado la esquina y se ha dirigido hacia otro sitio. Esa información no llegará a ser conocida por la pareja a no ser que el sistema sufra un ataque informático y todos esos datos recabados salgan a la luz, pero pueden dar una infoemación muy valiosa a la Administración (léase Gobierno) sobre los hábitos de una persona determinada. De verdad te encanta ese sistema? Y por el módico precio de cuántos millones de euros?
Los problemas de privacidad de un sistema RFID instalado en una tarjeta personal, o mejor aún, en el eDNI personal, son los mismos que tienen las actuales tarjetas de débito/crédito, las tarjetas de telefonía móvil, los sistemas de mensajería por internet fijo o móvil (whatsapp, messenger,...), o los sistemas de contratación telemática vía internet. Todos esos datos son sensibles y deben ser protegidos por la ley debidamente, pero argumentar que la captación de dicha información es óbice para implantar un servicio de transporte más económico, justo, eficiente, rápido y cómodo, supone abogar también por la erradicación de todos los servicios telemáticos nominativos que existen en la actualidad... En cualquier caso, el sistema de gestión y pago que propongo, sería siempre algo opcional para el usuario, pudiendo compaginarse con el sistema de gestión y pago anónimo que propones, o con cualquier otro. Un saludo cordial
Sigo sin entender qué justificación le das a la recogida de datos masiva. Si yo tengo un bar, puedo preocuparme mucho por la salud de mis clientes y pedirles a todos ellos el DNI en la puerta para consultar bases de datos de alcohólicos, para evitar contribuir a su adicción negándoles la copa si se verifica que aparecen en dichas bases de datos. A ver si me entiendes: no es proporcional recoger estos datos de forma masiva. Y si además es opcional, qué sentido tendría? Económico sería no realizar inversiones desproporcionadas al beneficio que se pretende obtener, teniendo en cuenta que los actuales sistemas han costado muchos millones a los contribuyentes y llevan cuatro días funcionando. Ya verás tú lo justo que te puede parecer a ti y a tu bolsillo que en tu edificio cambien el ascensor que tiene 4 años de antigüedad, porque a los vecinos de tu edificio les parece mucho más eficiente energéticamente el modelo que acaba de salir al mercado. Saludos
Los responsables políticos que decidieron instalar los actuales equipos de acceso sin contacto, sabían que se trataba de una tecnología obsoleta frente al RFID, ya que apenas mejoraba la gestión del tránsito respecto al sistema anterior, ya que siguen existiendo torniquetes en el metro y cercanías, y hay que pararse para pasar las tarjeta sin contacto en los autobuses, mientras que con el sistema RFID no habría torniquetes ni esperas en los autobuses... Está claro que la implantación del actual sistema sin contacto ha sido una estafa, que antes o después deberían pagar en los tribunales, los políticos que apostaron por ella... Un saludo cordial
La implantación de la tecnología RFID en el transporte público (igual que en cualquier sistema logístico de mercancías), se realiza para optimizar al máximo los recursos disponibles (espacio en almacenes, vehículos disponibles, rutas más cortas y rápidas, recursos humanos, tiempos de carga y descarga, inventarios automáticos...). Un auténtico sistema RFID (con arcos de lectura masiva a la entrada y a la salida, no con lectores que resultan difíciles de usar para personas invidentes, de movilidad reducida, o simplemente torpes) permitiría: reducir los tiempos de acceso a los viajeros en un 50%; aumentar frecuencias de paso de vehículos en tiempo real; rediseñar los itinerarios de los autobuses, para evitar/minimizar los transbordos; pagar por km recorrido y mediante domiciliación bancaria (como con la telefonía), y un largo etcétera. Instalar el RFID, y no aprovechar nada de su potencial de optimización... es una auténtica estafa. Un saludo cordial
Los arcos de lectura masiva requieren un gasto importante, con la única finalidad de implantar un sistema tarifario por kilometraje. Que un arco rfid aporte estadísticas de uso al Consorcio, no lo dudo. Pero, es proporcional la inversión al beneficio que se espera obtener? Es mal sistema el de las coronas tarifarias? Hay que cambiarlo por cambiar o porque nos han metido en la cabeza que diez estaciones de metro cuestan 2 € y una 1,5 € (tarifas totalmente arbitrarias, bajo mi pubto de vista, en absoluto justificadas más que por un simple afán recaudatorio). Además, un arco de lectura masiva presenta muchas incógnitas desde el punto de vista de la protección de datos, ya que puede leer (accidentalmente o no), cualquier otra tarjeta que esté en posesión de los usuarios. Ese sistema deberá ser auditado cada dos años en cumplimiento del Reglamento que desarrolla la LOPD. De verdad es ésta una medida orientada a beneficiar al usuario, a promover el uso del transporte público?
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Creado el 09/10/2015 15:08
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