Medir partículas PM 2.5 y 10 en la estación del Ensanche de Vallecas

En la actualidad la estación de control de calidad del aire ubicada en el Ensanche de Vallecas (Av. de la Gavia esquina con Av. de las Suertes) mide los siguientes contaminantes: monóxido de nitrógeno (NO), dióxido de nitrógeno (NO2), óxidos de nitrógeno y ozono.

El Ensanche de Vallecas se encuentra limitado por la carretera de Valencia (A3), atravesado por la M-45 (que divide el barrio en dos) y muy cerca de la M-50 (a menos de 1 km del barrio y a menos de 4 km de la estación de control) y de la M-40 (a escasos 2 km del Ensanche de Vallecas). Además, en el distrito de Villa de Vallecas también existen otras fuentes de contaminación, como el Parque Tecnológico de Valdemingómez (a escasos 2 km del barrio), la Tolsa (a poco más de 1 km) o varias galvanizadoras, desguaces/chatarrerías industriales o plantas de áridos entre la avda de la Democracia y el polígono industrial de Villa de Vallecas. Además, bastante más alejada, a 15 km del Ensanche de Vallecas, se ubica la cementera Portland Valderribas, que además de su actividad original, se propuso como lugar para incineración de residuos.

Consideramos necesaria la ampliación de la medición de partículas contaminantes por la estación de control del Ensanche de Vallecas, debiéndose incluir, al menos, la medición de partículas PM 10 y PM 2.5. Las principales fuentes de emisión de dichas partículas son las cementeras, las grandes instalaciones de combustión, la incineración y coincineración de residuos (incineradora de Valdemingómez) y el transporte y carburantes (A3, M-45, M-40 y M-50).

Existe amplia bibliografía sobre los efectos que las partículas PM10 y PM2.5 tienen sobre la salud. Las partículas PM10 penetran hasta las vías respiratorias bajas, causando enfermedades respiratorias, problemas cardiovasculares y cánceres de pulmón; mientras que las PM2.5, al ser más pequeñas, penetran hasta las zonas de intercambio de gases del pulmón y, por tanto, las consecuencias sobre la salud son mayores. La infancia es uno de los grupos más sensibles (tienen un mayor ritmo respiratorio y una mayor actividad que las personas adultas y, además, su tiempo de exposición a los contaminantes del Ensanche de Vallecas es mayor) y, por tanto, corren un mayor riesgo de padecer los efectos negativos de estos contaminantes. Por ello, consideramos imprescindible esta actuación.

Este tipo de partículas sí son medidas en otras estaciones de control ambiental existente en la ciudad, como por ejemplo en Sanchinarro, por lo que sería viable hacerlo también en la estación del Ensanche de Vallecas.