Reforma de las aceras de la calle María de Molina.

La calle de María de Molina es una de las arterias prinicipales de nuestra ciudad. Sus aceras, a diferencia de las de otras calles importantes del distrito, llevan décadas sin arreglarse de forma integral. Hasta ahora, solo se han ido poniendo parches.

El resultado es el que es: hundimientos, piso irregular, distintos tipos de adoquines, restos de las antiguas acequias que unían alcorques, zonas levantadas por las raíces de los árboles, bordillos al ras de la calzada (con lo que estas se inundan los días de lluvia), motocicletas aparcadas en las aceras... No solo el aspecto es deplorable, también hay cuestiones de seguridad para el viandante de por medio.

El objetivo sería llevar a cabo una renovación total sin modificar la morfología de las aceras (salvo en las orejetas de las intersecciones) que recuperara el espacio y lo convirtiera en un lugar agradable para pasear. Se podría aprovechar la renovación del pavimento para instalar vallas que, por lo menos, obstaculizaran el aparcamiento de las motos en lugares indebidos.