La fuente de los pajaritos

Código de la propuesta: MAD-2023-10-35212
Una fuente para los pájaros de la Dehesa de la Villa (la Casa de Campo, etc) para que beban y se refresquen. Pensamos especialmente en los cálidos y secos veranos de Madrid
LA FUENTE DE LOS PAJARITOS
La idea
Madrid, 22 de julio de 2022
13.30 horas
Hoy hace un calor tórrido, estamos en plena canícula, llevamos ya varios meses de sequía. Camino bajo un sol abrasador por el paseo de la Dehesa de la Villa que sube hacia Tetuán. Una de las fuentes de agua para beber pierde un fino hilo de agua. Lo veo desde lejos. De frente, hacia mí, un hombre mayor baja paseando despacio. Se protege la cabeza con un periódico. El agua que desborda el sumidero cegado por la tierra rebosa y hace que corra un finísimo hilo por la cuneta de adoquines. En algunos puntos el agua se remansa en pequeñísimos charcos. Me acerco a la fuente para cerrar el grifo. Hay escasez de agua. Cualquier gota perdida es un pequeño drama. El hombre que camina hacia mí me dice que no cierre el grifo, que lo ha dejado él mismo abierto. Me sorprende su actitud. Concluye su frase: he dejado que corra para que beban los pajaritos… su actitud me parece amable, noble, sensible y delicada; nos cruzamos yo, hacia Tetuán y él hacia la Ciudad Universitaria. No volvemos a vernos.
La dehesa
El parque de la Dehesa de la Villa es un espacio naturalizado dentro de la ciudad de Madrid. Su gran perímetro sirve a barrios tan distantes como Tetuán, Saconia, Valdeconejos, Puerta de Hierro o la Ciudad Universitaria de Madrid. Linda al oeste con el río Manzanares y más allá con la Casa de Campo. Mantiene su esencia típica de dehesa, de monte bajo cubierto por encina, pino piñonero, fresno, alcornoque, etc, formando un bosque abierto. Los suelos típicos de Madrid están cubiertos por gramíneas, jara, tomillo, zarzamora, Espino… Guarda gran diversidad geomorfa, haciendo de los paseos por este parque lugares para la contemplación de rincones agradables, que sitúan al espectador en espacios abiertos con una larga perspectiva que llega hasta el horizonte donde encontramos la Sierra de Guadarrama. Otros espacios, por el contrario, umbríos cubiertos por las copas de los árboles y por taludes próximos cierran el paso creando algunos rincones para una contemplación en silencio. Se encuentra en una ladera suavemente inclinada y amplia que ofrece tardes largas y atardeceres de una extraordinaria belleza.
Un tesoro biológico
AVIFAUNA DE LA DEHESA DE LA VILLA. JUSTIFICACIÓN DE LA INSTALACIÓN DE UN BEBEDERO.
La Dehesa de la Villa es un Parque de 64 hectáreas de extensión situado en la zona noroeste de Madrid. Hay que destacar que, aunque está rodeado por distintos barrios de la ciudad de Madrid, recibe a nivel de su avifauna la influencia de la cercana Casa de Campo, e incluso, del Monte del Pardo.
Esto favorece la presencia de numerosas especies de aves, alguna solo durante los pasos migratorios, y otras sobrevolando el Parque procedentes de zonas cercanas, sin detenerse en el mismo, pero enriqueciendo su biodiversidad.
Sin embargo, muchas otras especies sí permanecen en él durante la invernada, para reproducirse, o durante periodos de descanso de varios días durante sus viajes de migración.
Entre estas, la lista de especies que se verían beneficiadas por la instalación de un bebedero es muy larga. Por citar algunas, muchas reproductoras en la Dehesa de la Villa, cabe mencionar las siguientes: Lavanderas, Pardillo, Lúgano (en invierno), Jilgueros, Picogordo, Escribano Soteño, Palomas Torcaz, Zurita y Bravía, Piquituerto, Verdecillo, Verderón, Gorrión Común y Molinero, Carboneros, Herrerillo y Estornino. Especies tan comunes como los gorriones, han sufrido la pérdida de un 21 por 100 de su población en España en los últimos 10 años, lo que representa 30 millones menos de aves.
Hay que destacar que, en los últimos 6 años, se ha registrado en la Dehesa la presencia de, como mínimo, 91 especies de aves, muchas reproductoras. Como curiosidad, cabe destacar que incluso una especie tan escasa y salvaje como el Búho Real, que se reproduce en un edificio de la zona, tiene su territorio en el Parque.
Por eso, si queremos favorecer su presencia, tenemos que tener en cuenta que la disponibilidad de agua resulta un factor limitante para todos los animales que habitan este Parque. Los terrenos que lo forman son sedimentarios, arenosos (lo que provoca que las aguas de lluvia se infiltren en el subsuelo rápidamente) y con importantes pendientes hacia el Valle del Manzanares. Esto es lo que provoca la falta, sobre todo en el final de la primavera y en el verano, de puntos de agua, tan necesarios para toda la fauna.
En el caso de las aves, esta es necesaria, no solo para beber. Necesitan el agua para su termorregulación, sobre todo en los días de más calor, cada año más frecuentes e intensos. (Todos hemos visto alguna vez a los gorriones bañándose en un charquito)
Hay que destacar la importancia del valor educativo que tiene la observación de la Naturaleza, sobre todo para las personas que no tiene otras posibilidades de desplazamiento a zonas más lejanas. Se mejoraría la oferta educativa para los Centros de Enseñanza del Barrio, que incluso podrían implicarse en el seguimiento de la utilización del bebedero a través de algún proyecto de Ciencia Ciudadana.
La fuente
La fuente de los pajaritos, objeto de este proyecto, nace con la idea de dotar al parque de una pequeña instalación que sirva para que las aves paren a beber y refrescarse especialmente en los meses de verano que en ocasiones son extremadamente secos.
La ubicación que propongo para situar la instalación es la curva del mirador. Quedará colocada entre la antigua carretera y el camino del canalillo, justo donde se produce un terraplén muy inclinado inaccesible y ligeramente protegido por dos almendros que pudieran servir de posadero para los pájaros.
La fuente se construirá en acero corten y adoptará la forma de una bandeja plana de forma irregular de unos cuatro metros cuadrados y escaso fondo: en torno a diez centímetros. Irá sujeta por un bastidor con pequeños pilares metálicos que salvarán las diferencias de cota del terraplén. El color del acero se camuflará perfectamente con el suelo. El cielo azul de Madrid se verá reflejado en las aguas de la fuente creando una suerte de paisaje invertido. He previsto una alimentación continua que gastará veinte litros de agua al día y que desbordará, gota a gota, sobre la tierra. Generará con ello una ligera humedad que servirá a los insectos y pequeños roedores que circundan el parque, así como a las especies vegetales que se coloquen al pie de la instalación.
Más de 80 especies de avifauna se beneficiarán de este pequeño humedal artificial. Esta pequeña instalación se suma al entorno muy cuidado tanto por los técnicos de Medio Ambiente como por los vecinos, que la sienten este espacio naturalizado como un tesoro propio en el medio de la ciudad.
El autor
La propuesta es de Juan Ramón Martín que es escultor fue autor del
Canal de Navalcarbón en la Dehesa del mismo nombre, situado en Las Rozas. A lo largo de 2 km se crearon fuentes, cascadas, remansos y espacios para la vida; el agua trajo consigo la aparición de anfibios, reptiles y la avifauna propia de estos espacios. Es un canal navegable con piragua
La Fuente del Cura en Madrid
Fuente-estanque en vivienda unifamiliar en Puerta de Hierro
Así como de varios proyectos en los que el agua ha tomado un papel protagonista.
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Creado por

Creado el 16/10/2023 20:57
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