Abrir el espacio del Real Observatorio Astronómico al público

Londres, Paris, Madrid... el impulso de la razón en la época de la Ilustración llevó a construir edificios que elevasen las ansias de saber de aquella época. Conjuntos únicos que todos conocemos: el Observatorio de Greenwich, en la capital inglesa y el Observatorio de París en la francesa; lugares visitables, abiertos al conocimiento de los ciudadanos. Sin embargo, ¿qué pasa en Madrid? En Madrid nos encontramos con un tesoro de igual valor, construído en 1790 en la esquina suroeste del céntrico parque del Retiro y que, a pesar de optar a convertirse en Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, la ciudad de Madrid lo ignora.

Madrid muchas veces sale perdiendo en cualquier comparación con otras capitales europeas, pero eso puede revertirse. No tenemos menos patrimonio que otras; tenemos historia, arquitectura y cultura, pero nos falta saber mostrar eso al visitante y al vecino; sólo así revertiremos comparaciones odiosas y mal fundadas. Por ello, propongo que el entorno que abarca el Real Observatorio, su entorno museístico, el CEDEX y otros edificios sean abiertos al público; aunque sea, sus jardines y la parte museística del Observatorio. No tiene sentido el tener un conjunto con tanto valor oculto tras una valla.

Para colmo, hay otro aspecto que podría explotarse: el Observatorio se haya en el Cerrillo de San Blas, una zona considerablemente más elevada que su entorno. No estoy del todo seguro, pero por la altura pienso que es posible que el sitio ofrezca unas vistas magníficas de Madrid lo cual es fantástico en una ciudad donde el único lugar para ir a ver vistas son las azoteas de edficios y no un accidente geográfico. 

Patrimonio cultural, ciencia, espacios verdes, arquitectura, vistas... ¿a qué esperamos para darle vida a este lugar tan especial? 

Aclaración: Actualmente el Real Observatorio es visitable, pero sólo con visitas concertadas y guiadas en días muy concretos. La petición apunta más, pues, a abrir al público todo el espacio y hacerlo más accesible, más atractivo al turista; convertirlo en una parte más del Retiro.