No a las obras sin ahorros.

La propuesta va encaminada a que se tengan que afrontar obras únicamente cuando estas sean finalizables para evitar que queden paradas e inutilizadas.

Es decir, no afrontar obras, salvo extrema necesidad, si no se dispone del capital total para hacer frente la obra. Durante la crisis se han quedado muchas obras en Madrid a medio terminar y que pasado un tiempo se han retomado los trabajos.

El caso es que es mejor afrontar 2 obras de 4, poder terminarlas y disfrutarlas que tener 4 a medias porque no se pueden afrontar los pagos. El resultado final es el mismo, pero permite tener unas cuentas saneadas, menos incertidumbre, ahorro en los materiales rotos/perdidos debido al parón y el deterioro del paso del tiempo en la obra sin terminar. Además los vecinos y demás ciudadanos sufren las menores molestias posibles.