Limpieza: servicio, concienciación, educación...

Estimado equipo de gobierno,

Tras sus primero 100 días de gobierno, algo muy importante, que afecta  a la ciudad, a sus ciudadanos y sus visitantes, sigue igual incluso peor. Me refiero a la limpieza de las calles, de los parques, la recogida de enseres y los excrementos de mascotas en vías publicas.

En días pasados he leído una carta de Ines Sabanes achacando la suciedad a los contratos firmados por el anterior equipo de gobierno y las contratas. En mi opinión, esa no puede ser excusa, como tampoco lo era la justificación que daba Rajoy a las subidas de impuestos por la nefasta herencia de Zapatero.

Pienso que hay que abordar el problema ya, con acciones urgentes, denunciando contratos si están mal, subcontratando nuevos servicios o pasando la gestión de los mismos al consistorio.

Pero también hay que hacer campañas que conciencien al ciudadano, que le ayude a reflexionar y colaborar no dejando desperdicios en vía publicas, enseres viejos, ni escupiendo o fumando en la puerta de edificios y dejando colillas. 

Madrid no es una papelera como piensan una gran mayoría de sus ciudadanos.

Obviamente, esa educación de base no se cambia en un día, pero algún día hay que empezar y para ello que mejor que campañas educativas en colegios públicos, privados y concertados.  Campañas publicitarias en metro, redes sociales y medios afines  con el fin de no incurrir en gastos en medios.

Una mayor vigilancia policial en contenedores de reciclaje, basta ya de furgonetas extrayendo papel de los contenedores y dejando lo que no les sirve en medio de la calle ante la impasibilidad de la policía.

Acabemos con los chatarreros con los carritos de supermercado desguazando motores, cañerías o frigoríficos en medio de la vía publica o volcando contenedores para ver que pueden sacar.

Imponiendo sanciones a las empresas que dejen sus residuos apilados en los contenedores de reciclaje.

Una menor permisibidad con los botellones, no ya por el daño que se hacen a ellos mismos, si no como queda la ciudad al día siguiente.

Sancionando a los dueños de perros que dejan sus excrementos en la vía publica o parques, por no ser muy duros una primera de apercibimiento y en caso de reincidencia una multa con alto importe económico.

Creo que hay muchas medidas que se pueden tomar, tanto en los servicios municipales como en la concienciación del ciudadano y, aunque no me gusten las sanciones, creo que por una buena e higiénica convivencia, en determinados casos de reincidencia, serían una solución.

Cualquier ciudad de Europa, con servicios de limpieza menores  a los que "disfrutamos", está más limpia que Madrid.