Propuesta para la creación de una linea de autobús fantasmagórica

Reconozco que tiene un aura poética muy intensa, y al mismo tiempo un lado humorístico, pero no ha tenido suerte. El pueblo de Madrid todavía no está preparado. Estoy convencido de que sería el único autobús que en realidad, aunque no lo parezca por su apariencia errática a la deriva, que "va a algún lado", en vez de todas esas lineas de autobús que parecen que van a algún sitio, pero que en realidad "no van a ningún lado". Siempre queda la posibilidad de que, efectivamente, el autobús sea recuperado por el sistema mercantil y acabe convertido en un autobús turístico, que no está mal, pero que sería una mera sombra, y ahora sí, una mera fantasmagoría de lo que podría haber sido.

Le he contestado lo siguiente: "Hola señor X, no es preciso ser desagradable. En vez de argumentar contra mi obra, se dedica a hablar de mi persona, sin conocerme en nada. Le daré algunas pistas: tengo 47 años y trabajo como obrero, y eso si, tengo inquietudes intelectuales y estoy interesado por el bien común, lo político y lo democrático. Me encantan las artes visuales y me gusta pensar. Esto es, no uso gafas y no uso pasta, ni uso gafapasta. Si quiere tener en encuentro con las tendencias artísticas surgidas desde los últimos 50 años, le recomiendo dialogar las obras, escucharlas, pensarlas, también leer. Sé que pensar es difícil en un mundo donde se estimula lo contrario, y donde no se enseña en ningún lugar a hacerlo, pero usted puede, no se desanime. No hay nada de rebeldía en mi propuesta artística, sino de construcción de espacios políticos y de convivencia. Veo que no ha hecho ningún esfuerzo en leer mi propuesta ni en pensarla. Vivir a base de esterotipos está bien, pero...

Entropía?

Me interesa su opinión de tal manera que pueda ir dando forma en este debate a esta idea para elevarla a la categoría de propuesta y sea implementada después de un serio debate a la vida social madrileña. Me parece interesante su opinión porque parece indicar que el arte contemporáneo "no puede solucionar los problemas que acucian de verdad a los mandrileños" , según sus palabras, y quizá sea verdad, ¿pero donde poner el límite?. ¿Es solo el arte contemporáneo la única actividad que se da en la ciudad que no resuelve problemas?, ¿ y está seguro usted de que de verdad el arte contemporáneo no ayuda a resolver los problemas de la ciudad?

Su aportación de que la propuesta artística del autobús fantasmagórico municipal se trasforme por la noche en un autobús noctámbulo, me ha parecido en un primer momento sorprendente, bien porque desconocía las características del autobús de Potter, así que he tenido que documentarme; por lo visto la descripción del autobús noctámbulo que usted comenta es la siguiente: El Autobús Noctámbulo es un vehículo que transporta a magos. Tiene tres plantas, es de color morado y tiene escrito Autobús Noctámbulo en letras doradas sobre su parabrisas. El conductor es Ernie (que ha demostrado tener una habilidad tal para conducirlo que puede ir a toda velocidad, esquivando los coches y autobuses por apenas centímetros), y el encargado, Stan Shumpike. El uniforme que viste el encargado es del mismo color del autobus: morado"...

Gracias por tu aportación, Edox, tu sugerencia de "Imposibilidad por peligrosidad" es sumamente importante, pues permite pulir y ajustar "lo peligroso" de la propuesta para que cuando se implemente esta pieza artística todo signo de lo peligroso desaparezca. Ahora bien, se trata de hacer desaparecer lo fisicamente peligroso, aquello suceptible de provocar accidentes. Sin embargo esta obra bien pudiera incluir otros significados de "lo peligroso", pues introduce el disenso en la flota de la EMT, la linea "F", que no es un autobús turístico, sino una obra política, en el sentido de lo político que ofrecen Mieke Bal, Ranciere, y Mouffe, esto es, el conflicto, la pieza fundamental para que la democracia se dinamice y avance, y por tanto el medio para resolver el conflicto mediante el acuerdo. No se trata de eliminar lo discordante, esto es, el autobús fantasmagórico, la obra de arte. No se trata de suprimir "al otro", sino trabajar para que "el otro" también exista. Un saludo.

Gracias por el comentario. Con esta propuesta estoy tratando de abrir un debate sobre los futuros caminos del arte contemporáneo y la reacción de los vecinos. Arte, política y acción van mucho más allá del arte político propagandístico. Me importa mucho tu opinión, que sobreentiendo "no favorable" por que imagino que te parece "delirante". No lo creo, simplemente es novedosa, muy económica (Hay que ver la cantidad de cosas que se pueden hacer con poquísimo dinero) Quizá mi propuesta puede parecer poco funcional, de poca utilidad para la vida cotidiana, y sin embargo, en mi opinión tiene una fabulosa carga de interacción social, la posibilidad de romper soledades, crear experiencias. Es cierto que ofrece un disenso en lo cotidiano, pero que al mismo permite imaginarnos otro medio de transporte posible, otra ciudad. Creo que es de las pocas propuestas artísticas próximas a la gente. Es puro espíritu democrático.

Rosa, estoy entusiasmado por tu aportación a esta obra de arte contemporáneo. Tu idea de implementar cañas y tapas a la obra está bien está bien, crea interacción,´pero creo que se aproxima peligrosamente a los límites del turisteo. No es un Autobús Fiesta o "TapaBus", como lo denominas, sino puro espíritu democrático en movimiento. El tapeo mola, pero creo que es algo que debe surgir de la propia obra, como la reflexión, el pensamiento y los acuerdos. Creo que esta obra sí que supera los límites entre el arte y la vida, fusionándolos. Me parece una experiencia comunitaria muy interesante, y que una ciudad como Madrid de vecinos avanzados, cultos y tolerantes, puede ser pionera. Muchas gracias por participar.