Eliminar los festejos taurinos y las subvenciones

Dios no hizo al toro para que fuese toreado y matado. Dios no creó al toro para ser toreado y matado haciendole sufrir.

Yo empezaría prohibiendo las fiestas de los pueblos donde haya maltrato animal, incluyendo capeas, corridas de vaquillas, etc. Partimos de un nivel de sensibilidad social al respecto claramente mejorable. Y, por supuesto, eliminaría subvenciones públicas para este tipo de "festejos".

Me ha costado decidirme, todas las propuestas me parecen positivas.

Es necesario mejorar la plataforma. Parece que he votado la propuesta cuando sólo quería leerla. No hay preguntas de confirmación ni opción de revocar el voto.

No creo que matar a un animal por placer y espectáculo sea digno de un pais del siglo XXI. Es incomprensible y menos hacer de ello un negocio y subvencionarlo!

Estoy a favor de retirar subvenciones no de prohibir. Prefiero que se extinga por sí misma está "fiesta". No quiero más confrontación

Suprimir el maltrato y la tortura a los animales en Madrid no debería ni consultarse. Es una cuestión de ética y dignidad humana.

No al maltrato animal

Yo quiero hacer uso de mi libertad y veo que aquí no se puede: o votas a favor de la propuesta o nada. Reivindico mi derecho a votar en contra de esta propuesta propuesta, O ES QUE "DECIDE MADRID" NO ADMITE DISIDENTES? HUELE A VENEZUELA? A mi me gusta la fiesta nacional y quiero que se conserve, considero que es patrimonio de España. Entiendo también que haya personas a les que no les guste, de la misma forma que a mi hay otras tradiciones/costumbres que no me gustan y no pido que se supriman, pero ahí esta la democracia en la que se supone que vivimos y en la que quiero continuar, y que supone que todos podamos vivir en comunidad y que el derecho y la libertad de cada individuo termina donde comienza el de quien esta al lado, parece fácil pero hay muchos que no lo entienden.

La tauromaquia es un arte que debe permanecer y ser protegida por los poderes públicos. El sufrimiento del animal no es un argumento valido para privar al pueblo ni de alimento ni de calzado ni de diversión.