Por una tauromaquia sin sufrimiento en Madrid

Comenzaré diciendo que yo he vivido desde niño muy cerquita de la plaza de toros de Ventas. Por inercia, en una época en que las corridas no se cuestionaban nunca (estábamos ciegos) he asistido a muchas tardes de toros y he visto sacrificar a muchísimos. Ya hace bastantes años no puedo soportar la visión de la corrida. Ese trance de las picas, las banderillas, las terribles estocadas, los descabellos, la puntilla, los caballos destripados...Es demasiado, es insoportable. Nadie se acuerda del pobre toro. Lo malo es que actualmente no se pueden prohibir porque de hacerlo, el toro desaparecería. Habría que reformar los espectáculos taurinos para que no se produzca mas el sufrimiento del toro.

Me duelen profundamente las cosas que se están diciendo sobre nuestro bellísimo animal totémico y simbólico nacional, el toro de lidia. Yo comprendo muy bien que las asociaciones defensoras de los derechos animales le quieran proteger asimilándolo al resto de los animales. Comprendo que haya gente que en el campo vaya a abrazarlos y darles cariño e incluso últimamente en las propias plazas de toros, durante la lidia, como ha hecho una señora creo que en Marbella. Todo eso me parece muy bien, pero lo malo es que están falseando la realidad y tratando de «desnaturalizar» las cosas. Ahora dicen que el toro de lidia no es una especie propiamente dicha, sino un bovino más. Vamos a ver, todos los perros del mundo descienden del lobo. Eso está claro. ¿Que tiene que ver en su comportamiento y en su aspecto un caniche con un lobo? Se han establecido unas diferencias bien claras. Todos los bovinos descienden del antiguo Uro. El Uro se extinguió en Lituania en el siglo XVII. En España quedaron las vacas y toros mansos y quedó un género especial, en estado semisalvaje, que es lo que hoy es la ganadería de lidia. Los romanos conocían bien al toro de lidia. No llevaban a sus circos a pelear contra leones y gladiadores a vacas pastueñas. Llevaban toros bravos. Estos toros en algún tiempo estuvieron por toda Europa, pero al final, solo se conservaron en España y Portugal. Como se usaban en las justas y torneos no se les extinguió por eso. El toro de lidia es un animal que solo debe su existencia a la participación en este tipo de festejos. Es verdad que, mediante la selección (fundamentalmente mediante la eliminación de las madres menos bravas) las diferentes castas de toros se han conservado bastante íntegras. El toro es un animal formidable, sin duda el mas valiente que existe. Aunque nunca ataca a traición, sus ataques son formidables y se pueden producir ante cualquier pequeña excitación. Sus defensas son todo para un toro. Si el toro pierde o se lastima un cuerno se queda retraído y es la mitad de toro que era antes. Aunque machos y hembras se crían separadamente, las peleas entre los toros son muy frecuentes. Son peleas a muerte e las que uno de los contendientes casi siempre termina muy mal parado. El toro derrotado en la pelea se denomina «abochornado» y se retira un tiempo de la manada. Durante ese tiempo el toro se vuelve peligrosísimo. Suele ser cuando matan a sus ganaderos y criadores. El toro bravo es toro ante todo y si se le pone por delante una vaca de leche también la deja preñada sin ningun problema. Es la misma raza, pero con muy diferentes connotaciones. Esta especie no es productiva ni como productora de carne ni leche. Todo su valor económico reside en las corridas de toros. Siendo uno de los animales mas bellos y hermosos de la  Creación, con ese bellísimo componente de la bravura, posiblemente sin las corridas lo perderíamos y España perdería su totem nacional numero uno. No queremos que el toro sufra, odiamos su espantosa muerte a estoque pero no queremos perder al toro tampoco. Habría que conciliar mediante una nueva especie de espectáculos taurinos en las que el animal no sufra ningún daño para que pueda continuar criándose y se productivo. Propongo las corridas de recortes, forcados, Don Tancredos, dominguillos o cualquier innovación de las muchísimas que se pueden hacer, pero por favor, no perdamos a nuestro toro de lidia , lo debemos conservar a todo trance.